5 TIPS PARA SER UN “MALDITO GENIO”
- @Oscar_pedraza_
- 27 abr 2015
- 3 Min. de lectura

“El genio se hace con un 1% de talento y un 99% de trabajo.” –Albert Einstein. Si esta frase fuera cierta y desde luego que lo es, se podría pensar que hay un cumulo infinito de talento que ha sido tirado a la basura. Cientos, miles o tal vez millones de seres humanos talentosos, pero que no han sentido el llamado, el toque divino, la fórmula mágica. En otras palabras, un poco menos sutiles, un poco más reales; no hicieron ni mierda.
Desde cineastas, escritores, artistas, músicos o empresarios, cualquiera que sea el camino que se tome, sin duda es susceptible de ser profanado con la genialidad. Pero ¿cuál es el camino? No lo hay, y si lo hay no está establecido, ni tampoco es solo uno. Por eso, traemos a colación algunas de las características más relevantes de un genio:
1. La curiosidad: Es la forma básica del aprendizaje, con ella se comienza la construcción de esa necesidad que más adelante los empujará a querer saber más del tema que los apasiona. Una clave para ser curioso es preguntar, cuando se pregunta se abre la puerta del entendimiento.
2. ¡Experimenta!: Experimentación viene de experiencia y la experiencia no es otra cosa que vivir determinada situación en carne propia. Debemos pasar rápidamente de la teoría a la práctica, y de esta forma encontraremos nosotros mismos esas respuestas que buscábamos leyendas los libros o escuchando las experiencias de otros.
3. Salir de la zona de confort: Esta frase tan comúnmente usada en todos los libros o videos de autoayuda para representar un estado de conformismo, puede verdaderamente ayudarnos siempre y cuando tengamos un método. La mejor forma es definiendo cuál es nuestra zona de confort, para saber hacia dónde exactamente tenemos que salir. Debemos anotar nuestras rutinas, nuestros gustos y en general las cosas importantes que hacemos, luego escribiremos nuestros objetivos y comenzaremos a cambiar esas cosas que escribimos paso por paso. Así bien si nuestra rutina de todos los domingos es dormir hasta tarde y nuestro sueño es viajar, podremos empezar añadiendo planes para ese día, como caminar o salir a lugares cercanos, poco a poco habremos construido una nueva rutina que irá evolucionando hasta que hallamos salido de nuestra zona de confort.
4. Innovar: Como decía el genio Albert Einstein: “Si siempre haces lo mismo, no esperes encontrar resultados diferentes”. La innovación es tener la mente abierta, pensar en las infinitas formas que existen de hacer algo. En ocasiones nos vemos inmersos en la rutina, y es tal vez la primera alarma que nos dice que debemos innovar. La forma básica de la innovación empieza respondiendo estas preguntas: ¿Qué queremos innovar? ¿Por qué queremos innovarlo? ¿Qué recursos tenemos para hacerlo? ¿Cuál es nuestro objetivo? Luego de esto solo debemos aplicar nuestra creatividad e ingenio para romper esos paradigmas y conseguir lo que nos proponemos otro tip importante es jamás prestar atención a los comentarios negativos, si a los constructivos.
5. Divertirse: La diversión es el componente más importante para el trabajo, de ahí que cuando somos niños nos enseñen cosas a partir de elementos lúdicos. Pero ¿Cómo podemos aplicar diversión a nuestro trabajo? Debemos empezar por lo básico, si estamos haciendo algo que no nos apasiona va a ser muy complicado encontrar diversión allí. Lo mejor es ubicarnos en un proyecto que nos guste, estando allí debemos ¡jugar! Las cosas serias por lo general son aburridas, pero si incorporamos pequeños juegos a nuestras rutinas activaremos zonas en nuestro cerebro que nos permitirán estar más atentos. Lo segundo es cambiar nuestra actitud, la programación neurolingüística nos enseña que las palabras tienen el poder de generar un eco en nuestro inconsciente, así debemos configurar nuestra mente con pensamientos positivos para tener todo el día un actitud agradable.
En conclusión para ser un ¡Maldito Genio! No tenemos que haber nacido con una inteligencia superior como muchos piensan, basta con incorporar estos tips y tener en cuenta que el genio se completa con un 99% de trabajo. Así que ¡MANOS A LA OBRA!





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